Bandas criminales usan niños para diferentes delitos.

Los reportes agregan que los criminales involucran a los menores en 22 tipos de delitos, que van desde tráfico de droga, secuestro y trata de personas, hasta extorsiones, contrabando y piratería. Verónica Juárez, Diputada por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), consideró estos tipos de explotación como una esclavitud moderna a la que son sometidos, particularmente niños de entre 9 y 17 años.
“En la actualidad están esclavizados, son esclavos de la delincuencia organizada, a través de la vía del rapto, del engaño y la coerción, que se acompaña de violencia física y emocional, con lo cual los obligan a que participen en este tipo de actos delincuenciales”, apuntó.
La legisladora detalló que niños desde los 9 y 10 años son involucrados en el delito de trata de personas. A los 12 años, se les utiliza para cuidar las casas de seguridad y controlar que no se escapen las víctimas de secuestros y de levantones.
A partir de los 16 años, los niños que muchas veces son raptados, sometidos física y emocionalmente y entrenados en el uso de armas son puestos a trabajar en ejercicios más violentos, como secuestros y asesinatos.
Por su parte, la diputada Lucía Pérez Camarena, de Acción Nacional (PAN) informó que la captura de menores de edad por delitos contra la delincuencia organizada creció 100 por ciento, de 806 a mil 604 en todo el país.
“Los niños son integrados a la operatividad criminal porque no son los primeros sospechosos para la policía, no son punibles cuando tienen menos de 12 años y para los adolescentes las sanciones son considerablemente menores”, detalló la legisladora por Jalisco.
El fenómeno de los “niños sicarios” o “niños soldado” ha sido documentado por los medios de comunicación, con mayor intensidad desde 2010, año en que la opinión pública se consternó al conocer la historia del “El Ponchis”, un niño de 12 años, integrante del Cartel del Pacífico Sur, que mataba y degollaba a sus víctimas.
Ese mismo año, Rossana Reguillo, investigadora del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Occidente (ITESO), documentó la historia “Beto”, un joven de 16 años, nacido en Turicato, Michoacán, quien relató de detallada los 18 homicidios que había cometido.
“Me chingué al puto de la tienda, a su hermano y a un compita que andaba con ellos y a veces, con nosotros. La verdad no sentí nada, les metí el chivo como si ya supiera y mi jefe nomás se reía, “bien bravo salistes mi “Beto”…y se persigno y decía “el señor es mi pastor”.
Y la mera verdad, yo estaba contento de que mi jefe estuviera contento. Lo malo vino después. El cabrón de mi jefe nos dijo, vamos a llevarle un regalo al patrón. Saco un cabrón cuchillo endemoniado, del tamaño de su pierna y zas, zas, zas, cortó las tres cabezas como mi padrino se las cortaba a las gallinas en el rancho…”, afirmó el adolescente en su testimonio a la investigadora.
El fenómeno no es nuevo, ni es exclusivo de las administraciones federales panistas o priistas, desde el 2011, durante el gobierno del ex Presidente Felipe Calderón, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) había expresado su preocupación sobre la creciente participación de niños y adolescentes en ejércitos no regulares, como cataloga la ONU a los grupos del crimen organizado.
Ese año, México presentó un informe a la ONU en donde decía que se estaba cumpliendo “de manera fiel” con el Protocolo Facultativo a la Convención de Derechos del Niño, relativo a la participación de niños en conflictos armados.
Sin embargo la ONU expresó su preocupación de que esto no fuera así, en virtud de que se estaba incrementando la participación de niños en estos grupos de delincuencia organizada “El protocolo dice que los niños no deben participar en ningún conflicto armado, en grupos paramilitares o ejércitos no regulares, eso es lo que dice este protocolo en alguno de sus 12 artículos.
Lo que la ONU dice que si bien en México los niños no participan en ejércitos regulares, si exteriorizaba su preocupación de que estuvieran cooptados por el crimen organizado”, precisó la Diputada Verónica Juárez Piña.
10 MILLONES DE NIÑOS EN RIESGO DE CAER EN MANOS DEL CRIMEN
Publicar un comentario